Entradas

Lluvía y un café

Estaba lloviendo, tomaba un café. El lugar vacío de enfrente tenía tu nombre. Pero tú... Ya estabas en otro lugar. Así son las cosas, porque alguna vez si estuviste en ese lugar, pero las oportunidades son como aquel atardecer que vimos juntos, sentados a la orilla de ese lago que tanto nos gusta, pasan rápido y no vuelven. Un nuevo atardecer vendrá y no será igual, así como tú y yo... Ya no somos los mismos.

Libre albedrio

Imagen
¿Una ilusión nada mas?

The end of august (A finales de agosto)

Imagen
Procastinación palabra corta para lo mucho que encierra. Decido iniciar con esa palabra, porque es justo lo que me ha llevado a escribir esto tres días después de lo que debía haberlo hecho. Pero dar detalles al respecto será para otra ocasión, irónicamente lo dejo para después. Han pasado ya dos años y medio desde la última vez que mis dedos se ubicaron sobre el teclado para dejar un par de líneas escritas sobre mis vivencias, eran otros tiempos y otras condiciones cuando escribía al menos una vez por mes, pero las cosas cambian. Se dice que en esta vida lo único constante es el cambio, y en el último año esto se ha vuelto una constante en mi vida. El cambio siempre lleva cierto grado de resistencia y temor, porque acéptalo nos gusta tener el control de todo. Pero este post tampoco es para hablar sobre el cambio, este post es para hablar sobre algo más. Hace algunos años en twitter comentaba con algunos amigos, que grandioso sería que en Guatemala tuviéramos un concierto de Yanni,

Recuerdos

Acostado en la hamaca recordaba, porque era lo único que le quedaba, recuerdos. Porque algunas veces pensamos que los amigos y el amor durarán para siempre, pero al final son solo recuerdos. Y no entendía porque todos cambian, pero es un hecho que todos lo hacemos. Sonrió y recordó una vez más los momentos alegres que ahora eran solo eso, recuerdos. Porque lo que alguna vez fue, ya no es. http://www.youtube.com/watch?v=eXvo0j97V_E

Cortito de hoy

De esas veces que a su cabeza venia la idea, lo estás haciendo mal, una y otra vez... Y así el tiempo pasaba. Porque el tiempo no perdona, y a veces las personas tampoco.

Otra de esas historias que no serán leidas

Hace casi 4 años llegué al mundo de twitter, en ese entonces era un mundo muy diferente, al menos en Guatemala no había llegado el boom de los "teléfonos inteligentes" que trajeron muchísima gente a esta red, justo en esos días, se dio un fuerte golpe a la liberad de expresión al culpar de pánico financiero a @jeanfer por el sonado caso de Rodrigo Rosenberg, el bloqueo a wordpress y en algunos casos blogspot creo (no lo recuerdo bien), en esos días también estaba por llegar el esperado día del piletazo de cierre, y justamente por eso creo que ingrese a este mundo, tratando de huir de la brutalidad de semestre que estaba viviendo, de lo en extremo harto que estaba de la Universidad, de que ya no escribía tanto en el blog (mi anterior medio de expresión), mi miedo a los trolls que habitaban el extraño mundo de twitter en esos días me impidió hacerlo antes, una combinación de muchas cosas, pero finalmente me decidí y vi la luz en este nuevo mundo un 1 de mayo a las 6:18 de la ta

Que rápido pasa el tiempo

Imagen
Frase comúnmente dicha cuando nos hemos metido tanto en la rutina y ya los días semanas, meses y años pasan a nuestra percepción a un ritmo acelerado, muchas veces sin sentido, nos levantamos porque simplemente toca hacerlo hay que ir a trabajar/estudiar, hay que comer, regresar a la casa, y después dormir para estar descansado y al siguiente día volver a hacer lo mismo, es sumamente sencillo caer en esa rutina y quedar atrapado en una espiral desesperante que lentamente consume y mata.  Esperando desesperadamente   un tiempo de vacaciones para decir al final "No fueron suficientes", necesito más tiempo. Y es que nos pasamos la vida entera luchando por "vivir" cuando en la simplicidad del día a día, es que realmente esta la vida, y como dirían una canción las cosas más triviales se vuelven fundamentales, recordemos que nuestros días son un regalo de Dios. Empecemos a dejar la lucha desesperada por vivir, y apreciemos los detalles del día a día y la simplicidad de la